Cubiertas ajardinada con láminas impermeabilizantes bituminosas y sintéticas de PVC-P

sistemas de impermeabilización para cubiertas ajardinados

Cubiertas ajardinada con láminas impermeabilizantes bituminosas y sintéticas de PVC-P

Las cubiertas ajardinadas, también conocidas como cubiertas verdes, son una solución arquitectónica cada vez más popular debido a sus numerosos beneficios ambientales y estéticos. Contribuyen a la mejora de la eficiencia energética de los edificios, la gestión del agua de lluvia, la creación de nuevos espacios verdes y la mejora de la biodiversidad urbana. Sin embargo, para que una cubierta ajardinada funcione correctamente y no cause problemas a la estructura subyacente, una impermeabilización efectiva es absolutamente crucial. Sin una barrera impermeable robusta, el agua y las raíces de las plantas podrían dañar seriamente el edificio.

Dos de los materiales más comunes y fiables para la impermeabilización de cubiertas ajardinadas son las láminas de bitumen y las láminas sintéticas  de PVC-P.  

Las láminas de bitumen, también conocidas como membranas asfálticas, han sido un pilar en la industria de la impermeabilización durante décadas. Están compuestas por una base de asfalto modificado (con polímeros como APP o SBS para mejorar su flexibilidad y resistencia a la temperatura) reforzada con una armadura interna, generalmente de fibra de vidrio o poliéster. Sus ventajas son:

  • Comprobada eficacia: Su historial de rendimiento a largo plazo es extenso, ofreciendo una solución duradera y confiable.
  • Excelente adherencia: Las láminas de bitumen pueden adherirse bien a una variedad de sustratos, y las capas se sueldan entre sí mediante calor (soplete), creando una superficie continua y sin fisuras.
  • Resistencia mecánica: Son robustas y resistentes a la perforación, lo cual es importante en una cubierta ajardinada donde las raíces de las plantas pueden ejercer presión. Las versiones anti-raíz incorporan aditivos especiales para repeler el crecimiento de las raíces.
  • Coste efectivo: Generalmente, las láminas de bitumen son una opción más económica en términos de material en comparación con otras soluciones de impermeabilización.

Dentro de la gama de láminas bituminosas para cubiertas ajardinadas, recomendamos la . Es una lámina de 1 m x 8 m y 5 kg/m2 de betún modificado con elastómeros, con armadura de fieltro de poliéster no tejido y reforzado, acabado interior plástico y exterior gránulos minerales. El mástico incorpora un aditivo antirraíces. Además, BMI pone a vuestra disposición los , que puedes consultar en nuestra página web. Además, estas soluciones están recogidas en el .

Las láminas de PVC son membranas sintéticas termoplásticas que ofrecen una solución de impermeabilización ligera y flexible. Se instalan en obra mediante soldadura por aire caliente. Sus ventajas son:

  • Ligereza: Son significativamente más ligeras que las láminas de bitumen, lo que reduce la carga sobre la estructura del edificio, un factor importante para cubiertas ajardinadas.
  • Flexibilidad: El PVC es un material muy flexible, lo que le permite adaptarse fácilmente a diferentes formas de cubierta y a los movimientos estructurales del edificio.
  • Instalación sin llama: La soldadura por aire caliente elimina el riesgo de fuego asociado con la aplicación de bitumen, lo que la hace más segura y rápida en muchos entornos.

Dentro de la gama de láminas sintéticas de PVC, las láminas recomendadas para cubiertas ajardinadas, son las láminas Cosmofin GG PLus, con certificación antiraíces según ensayo EN 13948, requerido por el marcado CE para este tipo de cubiertas. 

Estas láminas forman la membrana de impermeabilización de nuestros “Sistemas Cosmofin para Cubierta Ajardinada”. Cuya información está disponible en nuestra página web. 

Independientemente del material elegido, hay varios factores críticos a tener en cuenta para asegurar la longevidad y el éxito de la impermeabilización de una cubierta ajardinada:

  • Diseño de capas: Una cubierta ajardinada no es solo la capa impermeabilizante. Requiere un sistema multicapa que incluya (de abajo hacia arriba): la losa estructural, una barrera de vapor (si es necesaria), aislamiento térmico, la membrana impermeabilizante, una capa de protección (geotextil o fieltro protector), una capa de drenaje, una capa filtrante (geotextil), el sustrato de crecimiento y, finalmente, la vegetación. Cada capa cumple una función específica
  • Protección anti-raíz: Es la característica más importante para las cubiertas ajardinadas. Tanto las láminas de bitumen como las de PVC ofrecen versiones con protección anti-raíz incorporada. Esta protección es esencial para evitar que las raíces penetren la membrana y dañen la estructura del edificio. Deberán usarse las láminas que superen el ensayo establecido por la norma EN 13948. Esta resistencia anti-raíces debe de estar declarada en el documento de declaración de prestaciones del material (DoP).  
  • Pendiente y drenaje: Asegurar una pendiente adecuada en la losa estructural y un sistema de drenaje eficaz es fundamental para evitar el estancamiento del agua sobre la membrana impermeabilizante.
  • Detalles y remates: Los puntos más críticos de la impermeabilización son los detalles en encuentros con muros, sumideros, petos y penetraciones (ej. tuberías, claraboyas). Estos requieren una ejecución meticulosa y refuerzos adicionales para garantizar la estanqueidad.
  • Normativa y estándares: Es imprescindible cumplir con las normativas locales y los estándares de la industria para cubiertas ajardinadas e impermeabilización.
  • Instalación profesional: La calidad de la instalación es tan importante como la calidad del sistema. Contratar a profesionales experimentados en la instalación de cubiertas ajardinadas y sistemas de impermeabilización es crucial.

Tanto las láminas de bitumen como las de PVC-P son excelentes opciones para la impermeabilización de cubiertas ajardinadas, cada una con su propio conjunto de ventajas. La elección entre una u otra dependerá de factores como el tipo de estructura, las preferencias de instalación, los requisitos de peso, presupuesto y la experiencia de los instaladores. Las láminas de bitumen ofrecen una solución robusta y de costo efectivo con un historial probado, mientras que las láminas de PVC destacan por su ligereza, flexibilidad y seguridad en la instalación. 

En última instancia, la clave para el éxito de una cubierta ajardinada reside en una planificación cuidadosa, la selección del sistema de alta calidad con protección anti-raíz y una ejecución impecable por parte de profesionales cualificados. Para todo esto, BMI pone a vuestra disposición un asesoramiento técnico a través de nuestro  Departamento de Prescripción enfocado en prestar asesoramiento técnico en proyectos a ingenieros y arquitectos. Además, BMI Academy promueve la excelencia en la instalación a través de cursos formativos a nuestros clientes.

Pide mas información

¿Tienes dudas? Solicita información a nuestro equipo de expertos

Pide información sin compromiso sobre Productos, Sistemas o Asesoramiento Técnico durante todo el proceso de obra.